Abuela

Repentinamente recordé el cacao acumulado en el fondo de la taza y me puse a llorar... entonces con recelo agarré una de las fotos del álbum y me la escondí entre el saco y la remera.
Todo el viaje a casa soñé con estrellas que se hacían polvo y dejaban de existir, y al llegar pegue la foto en la pared junto a las demás. La miré y llore largo rato, mientras recortaba papeles para pegar en otros lados. Es curioso que esta vez no se me pase... que no pueda dejar de pensar en vos, en tu cara diciéndome 'si te tomas toda la leche vas a encontrar una sorpresa...'
Siempre te recuerdo con mucho amor, pero a veces es triste, que se yo. Algunos días me gustaría que la vida tuviera menos sentido común y que aparecieras de repente regando las plantas, y me pidieras que te alcance una palangana para baldear el patio. O que me hicieras probar la comida para ver si está bien o le falta algo, porque a vos no te gustaba probarla mientras cocinabas.
Te extraño mucho, y aunque haya pasado un año y medio todavía te escribo cartas que no se a donde mandarte... y ya no sueño con vos, sólo con estrellas que se hacen polvo y dejan de existir.

Escritura automática

vuelvo a sentirme como hoja que escurre bajo el sol de madrugada
y en los sueños veo tejados trenes y atmósferas cargadas de lluvia verde
despertar en la mañana y desenvolverse de las sábanas
sin pensar en el abismo que se esconde en el fondo de la taza de café
y leche y café y ojos de gato que miran por la ventana...

En fin .-

Perdiste el tacto por completo...
es una lástima.