Fue gracioso que vos me mandaras esta postal sin saber que yo te iba a escribir una carta -si, esa carta que empecé a escribir antes de que te fueras, cuando estaba de viaje, porque ya te extrañaba-. Fue gracioso que al volver de mi viaje vos ya no estuvieras, y cuando te fuiste a pasar esos días con Tay al Gran Cañón me mandaste esas líneas -tan poquitas palabras pero tan suficientes- y que cuando vos volviste a casa te encontraras con la sorpresa de que yo también te había escrito. Será esa telepatía rara que compartimos desde el primer día, esa forma de pensar y sentir tan simbiótica, tan nuestra.

Te fuiste hace muchos días ¡y todavía siento que falta tanto para que vuelvas!. Aunque si, lo se, si vamos a ser realistas te fuiste hace exactamente 29 días y volves en 11 días más. ¡Y para mí es una vida entera lejos de vos!.
En fin, gracias por la sorpresa, gracias por pensar en mí y por quererme como soy. Gracias por imaginar tu vida junto a la mía hasta el fin de los tiempos -y si, somos así, melosas!-
Te ama, Nata.
I would call you up every Saturday night
and when both stay up till the morning light
singing ‘Here we go again!’
And the time goes by, I will always be
In a club with you in 1973,
Singing ‘Here we go again!’.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario